¿Cómo afecta la inflación a la demanda del oro?

La inflación es uno de los aspectos de la economía más importantes para los consumidores. Cuando sube la inflación, podemos comprar menos bienes y servicios con nuestro dinero, perdiendo así poder adquisitivo, lo que empeora nuestra calidad de vida. Esa temida subida de la inflación beneficia al oro, puesto que incrementa la demanda del metal precioso al ayudar a reducir su impacto en la economía. Comprar lingotes de oro o monedas de inversión se convierte entonces en una excelente opción como método de protección ante la inflación.

Teniendo en cuenta las dudas que genera la relación entre la inflación y el oro, a continuación, queremos explicar detalladamente en qué consiste exactamente la inflación, cuáles son las expectativas para los próximos años y de qué forma puede ayudar el oro frente a ello.

¿En qué consiste la inflación?

La inflación, en economía, consiste en el aumento generalizado y sostenido de los precios de los bienes y servicios del mercado en un país, durante cierto tiempo. Suele ser en torno a un año. Esta subida en los precios, hace que con la misma unidad monetaria, podamos adquirir menos bienes y servicios. En definitiva, la inflación es la consecuencia visible derivada de la devaluación de la moneda.

¿Cómo se mide y qué provoca la inflación?

Para medir correctamente la inflación se utiliza el aumento de precio de una cesta de bienes ponderada y su variación anual, a través del Índice de Precios al Consumo (IPC). Hay varios niveles de inflación:

  • Moderada: menos del 10% anual.
  • Galopante: de dos o tres dígitos.
  • Hiperinflación: superior al 50% mensual (cerca de 13.000% anual).

Lo que lleva al aumento de la inflación, entre otras cosas, es el aumento de precio en las materias primas, el incremento de la demanda de bienes, o la previsión de la subida en los precios. Hay numerosas causas.

Cómo protege el oro frente a la inflación

Ante una inflación en aumento, las principales consecuencias son la devaluación de la moneda y la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores. En este entorno de amenaza, los inversores tratan de encontrar medios que les permitan proteger al máximo su patrimonio. Es aquí cuando el oro tiene un papel relevante, puesto que se comporta mejor que otros activos en periodos de alta inflación. En periodos de baja inflación, además, el oro tiende a revalorizarse.

Con esto en mente, si lo que un inversor quiere es preservar el capital, comprar oro siempre ha sido la mejor forma de hacerlo. ¿Qué ventajas aporta el metal precioso dorado cuando crece la inflación?:

  • Permite diversificar la cartera de inversión.
  • Protege frente a lo que se conoce como “tail risks” o riesgos de cola”. Estos son eventos que no tienen muchas posibilidades de ocurrir, pero que afectan a la cartera de inversión.
  • Ofrece más liquidez que otros activos como las acciones o los bonos.
  • Protege la cartera de inversión tanto en tiempos de inflación alta, como en los que se da una fuerte deflación.
  • Protege también del riesgo de devaluación de las divisas.

Si durante los próximos años se produce un descontrol de la inflación, el riesgo de poseer oro se minimiza. Cualquier consumidor o pequeño inversor puede apostar por adquirir oro físico para protegerse de la inflación y de la pérdida de poder adquisitivo.

En la situación actual, teniendo en cuenta que venimos de una gran crisis sanitaria, todo apunta a que a medida que comenzamos a salir del confinamiento y avanzan las vacunas, la economía se va recuperando, lo que implica que durante los próximos años veremos un aumento en los niveles de inflación. ¿Es entonces el momento de invertir en oro?

En Ciode creemos que comprar oro físico es una buena forma de inversión en comparación con otros activos. Supone menos riesgos, es un buen activo refugio, protege de la inflación, y, además, ofrece una liquidez inmediata.